Línea Directa
Y ayer, efectivamente, el presidente ruso contestó algunas de las más de 2 millones de cuestiones recibidas. Buenas palabras y carisma. Vladímir Vladimírovich casi nunca defrauda. Se mantiene en una medida aunque cordial tensión, repartiendo datos y jugando unas manos con su pueblo. Ya me gustaría a mi que alguna vez alguno de nuestros presidentes se dignará a imitarle. Lo del populismo, parlamento como voz de los ciudadanos, instituciones garantes….memeces. Un cara a cara, aunque sea filtrado, siempre revela detalles. Para mi es evidente que los rusos, generalizando, confían en su presidente y que como país, su conciencia colectiva no se traiciona a si misma. Amén
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